Transcript of SOLO EL 8% DEL MUNDO VIVE EN DEMOCRACIAS REALES - David Jiménez sorprende con esta afirmación

Ahora que se os escucha mucho esto de que en España vivimos en una dictadura, y a mí me parece una de las grandes gilipolleces que escucho, porque España es una democracia defectuosa. En eso creo que estamos todos de acuerdo. Hay muchas cosas que necesitan mejora, empezando por solucionar la corrupción que hay, la independencia judicial, los medios de comunicación, de eso ya hablé mucho en el director. Tenemos muchas cosas que mejorar como democracia, pero a mí me ofende que se diga que España es una dictadura, porque yo he estado en dictaduras donde de repente media noche alguien llama a tu puerta y se lleva a tu hijo a la cárcel. Donde los periodistas son asesinados por contar la verdad. Donde libertades que nosotros consideramos básicas, estar yo contigo aquí, y los dos hablando en libertad y diciendo lo que nos dé la gana, nos llevaría a los dos a una celda. Entonces, me parece muy respetuoso, y esto lo dice Mi amigo Abraham Jiménez, que es un disidente cubano, que tuvo que salir del país después de que el régimen cubano lo acosara, lo persiguiera durante años a él y a su familia. Y él me dice: No sabéis lo que es una dictadura.

No sabéis lo que es asomaros por la ventana y tener siempre a dos policías vigilándote. No sabéis lo que es que todos sus amigos se cambiaran de acera cuando le veían por miedo a que lo relacionaran con él. No sabéis lo que es una dictadura. Entonces, creo que tenemos que ser un poco más respetuosos con aquellos que sufren dictaduras de verdad y no hablar de dictadura en España, hablar de los defectos de nuestra democracia. Solo el 8% de la población del mundo, a día de hoy, vive en democracias plenas, con sus problemas, con sus averías, con sus defectos. Pero en democracias donde yo me puedo hoy cagar en los muertos de Pedro Sánchez, si me da la gana.Y no pasará nada.Y no me va a pasar nada. Es verdad. Oye, aquí lo contamos en el primer podcast, que yo cuando dirigí el mundo, el denunciar la verdad me costó el puesto. Y luego escribí el director y todavía a día de hoy, publico un libro como Días Salvajes, la última novela, y hay un montón de sitios donde no me llevan. Y estoy censurado todavía en muchos sitios. Bueno, vale, pero ese precio es muy pequeño.

No estamos en la cárcel. No me están colgando de un puente como en México, donde mueren decenas de periodistas. No No es el caso de un bloguero en Irán o en Arabia Saudí, que a lo mejor lleva diez años en la cárcel por escribir algo que no le gustaba al régimen. Es decir, el precio que, por ejemplo, yo he pagado por contar la verdad, es muy pequeño. Y yo he visto, por ejemplo, en Birmania, y también lo contamos aquí, cómo mataban el ejército birmano, ejecutaba a sangre fría a un periodista, Ken Jinnagai, a pocos metros de donde yo estaba. Y eso sí que es una dictadura. Y eso sí que es pagar un precio altísimo por intentar contar la verdad. Nosotros tenemos el privilegio de que no pagamos ese precio. Pagamos precios ridículos, como es Que no te lleven a una emisora de radio, que no me hagan una reseña de días salvajes en algunos periódicos. Bueno, pues lo acepto y ya está. Que me gusta, no. Que creo que es ideal, no. Pero no tiene nada que ver con Irán y con lo que vive cualquiera que intente pensar libremente en Irán o en Cuba.

Y esto, de nuevo, es mi batalla. No es ideológico. Yo estoy harto de preguntarle a gente de Podemos ¿Es Cuba una dictadura? ¿Es Venezuela una dictadura? ¿Y qué te dicen? Que no lo es. ¿Por qué no lo es para ellos? Te voy a decir por qué. Porque ideológicamente se afina sus ideas y entonces justifico lo que hacen. En un programa de televisión, lo pregunté reiteradamente. Y recuerdo, además, que justo acababan de detener en Cuba a varias madres que lo único que habían hecho era preguntar por sus hijos desaparecidos. Mientras yo le estaba preguntando eso a esta persona de Podemos, ni siquiera recuerdo el nombre, le pregunté en directo, además, en la televisión, es Cuba una dictadura? Porque ahora mismo hay madres que están siendo arrestadas y detenidas porque sus hijos, simplemente por pedir democracia en la calle, están en la cárcel y no saben dónde están. Me dijo: No, no es una dictadura. Entonces, no podemos llegar a un consenso moral sobre lo que es una dictadura, independientemente ¿Estás pendiente de que sea un dictador de derechas o de izquierdas. Respetar los derechos humanos, respetar la libertad de prensa, respetar la libertad del individuo? Eso no tiene que tener nada que ver con qué ideología tienes.

Al revés, los propios de izquierda, los propios de derecha, tendrían que ser los primeros en denunciar cuando hay un abuso en su nombre y alguien suprime los derechos de las personas diciendo: Lo hago para defender la causa. Esta cosa de la causa es mi causa y la defiendo. Y ahí es donde yo veo que hay mucha niebla moral de decir: Bueno, voy a encontrar la justificación para los míos, siempre.